Según los últimos datos, la dificultad de minado de Bitcoin ha alcanzado los 35,63 billones de hashes, lo que significa una subida de más de un 13%.
La dificultad de minado indica lo complejo que es encontrar el hash o solución al problema criptográfico que hay que resolver para crear nuevos bloques de una blockchain. Esta dificultad de minado sirve para garantizar que las transacciones se procesen a un ritmo constante de 10 minutos y se ajusta cada 2016 bloques en función de los cambios en la tasa de hash. La tasa de hash o hash rate es la potencia de cálculo que se necesita para minar un bloque. La dificultad de minado y la tasa de hash están directamente relacionados ya que, un aumento de la tasa de hash significa un aumento de la dificultad de la minería.
Además de esta subida histórica de la dificultad de minado, también cabe destacar el destacable aumento de la tasa de hash, que también ha alcanzado su máximo contado 257 exahashes por segundo (EH/s), según datos de The Block.
La dificultad de minado de Bitcoin alcanzó un máximo de 25 billones el año pasado antes de caer en picado a 14 billones tras la represión de los mineros en China.
Desde entonces, la dificultad ha ido subiendo de forma constante alcanzando hasta los 31 billones en mayo, justo antes de la caída que generó el colapso de TerraUSD y LUNA.